Con Estados Unidos preparándose para coorganizar la Copa Mundial de la FIFA 2026, este amistoso contra Australia tiene el potencial de ser más que un simple partido de calentamiento. Es una prueba de tácticas, una medida de confianza y un vistazo al sistema en desarrollo de Mauricio Pochettino contra uno de los equipos más estructurados y infravalorados del fútbol mundial.

Australia tiene otra oportunidad de afianzar su identidad bajo el nuevo técnico Tony Popovic, quien está invicto y ha inyectado energía y confianza en el campamento de los Socceroos. Con su clasificación para el Mundial asegurada, esta será una prueba de temple en el extranjero y, además, en Norteamérica.

Tras un comienzo irregular en su período como entrenador, Mauricio Pochettino parece estar encontrando el ritmo que busca. El empate 1-1 de su equipo contra Ecuador fue una de sus actuaciones más serenas hasta la fecha, y controlaron más del 65% de la posesión y crearon numerosas ocasiones claras a pesar de ir perdiendo desde el principio. El cambio a una formación 3-4-3 ha sido primordial. No solo contribuye a la estabilidad defensiva, sino que también sirve de base para la creatividad y la libertad de los jugadores de banda, como Tim Weah y Christian Pulisic. El delantero del AC Milan fue reservado en el último partido, pero debería regresar al once inicial en este encuentro, aportando calidad de clase mundial a la zona de ataque del campo. 

La Alineación Prevista de EE. UU.:

Freese, Robinson, Richards, Ream; Weah, Tessmann, Morris, Arfsten; McKennie, Balogun y Pulisic (3-4-3). También destaca Folarin Balogun, que sigue demostrando su valía como delantero centro. Su movimiento, presión y capacidad de definición son exactamente lo que la selección masculina de EE. UU. necesita para que su unidad de ataque sea peligrosa. Además, detrás de Balogun estarán Weston McKennie y Tanner Tessmann para proteger la línea defensiva mientras ganan batallas en el mediocampo y marcan el ritmo.

Cuando Tony Popovic asumió el cargo en 2024, se esperaba algún tipo de transición. Adelantemos a octubre de 2025 y los Socceroos están invictos en sus últimos doce partidos, ¡con siete victorias seguidas! Este es un equipo que sabe quién es: organizado y compacto en defensa, agresivo en la transición y con una resistencia incansable. Su victoria por 1-0 contra Canadá la semana pasada demostró sin duda su capacidad para ser pacientes y tener la mentalidad adecuada. Los australianos pueden haber tenido menos oportunidades en el partido, pero aprovecharon una de ellas a través del joven de 19 años Nestory Irankunda en el minuto 71, y él también demostró por qué es quizás la promesa más en forma, y su rapidez será un beneficio contra la defensa estadounidense. 

Once Inicial Previsto de Australia (5-4-1):

Izzo; Rowles, Burgess, Degenek, Circati, Italiano; Irankunda, Balard, O'Neill, Metcalfe; Toure. Como siempre, mencionemos al portero Paul Izzo. Las ocho paradas contra Canadá no solo fueron sólidas, sino que también lo convierten en el capitán y titular a pesar de lo que el veterano Matt Ryan pueda aportar. Las decisiones de Popovic para la plantilla parecen audaces, pero continúan dando resultado.

Pulisic es capaz de cambiar el curso del partido. Su velocidad, regate y habilidad para crear jugadas de la nada están en el centro del ataque de EE. UU. Si EE. UU. encuentra una manera de ganar, probablemente será con un gol o una asistencia de Pulisic.

A la temprana edad de 19 años, la inteligencia y el movimiento de Toure ya son evidentes. Es el tipo de delantero que puede crear problemas a los defensas con muy pocos toques. Si los Socceroos logran encontrarlo en espacios libres, es capaz de castigar los errores. 

Las estadísticas resumen dos equipos que están igualados, uno con talento en ataque y el otro, firmeza en defensa. Esperen un partido estratégico donde el impulso puede cambiar en cualquier dirección.

Aparte del marcador, el partido actúa como el espejo más fiel: reflejando dónde se encuentran ambos equipos en este momento de cara a 2026.

Para Estados Unidos, es hora de afinar combinaciones y ver quiénes de este grupo pueden finalmente satisfacer la presión de las expectativas. Y para Australia, se trata de mantener la calma y demostrar que su racha invicta se ha ganado a través de encuentros que no son tan desiguales. El equipo de Pochettino intentará tomar el control al principio del partido a través de una combinación de alta posesión y presión en el mediocampo. Mientras tanto, la escuadra de Popovic jugará más replegada, buscando absorber la presión antes de lanzar contraataques rápidos, como lo hicieron en su partido más reciente con Irankunda y Toure.

Las dos naciones se han enfrentado solo tres veces anteriormente:

El último encuentro fue allá por 2010, una victoria por 3-1 para EE. UU., en la que Edson Buddle anotó dos goles y Herculez Gomez también marcó. Ambos equipos han cambiado sustancialmente desde entonces. 

La disciplina defensiva de los Socceroos dificultará las cosas para los hombres de Pochettino, especialmente si Pulisic no está en plena forma para contribuir. Sin embargo, EE. UU. también debería beneficiarse de su capacidad para controlar el balón, junto con la ventaja de jugar en casa y un mediocampo con mucha energía.

Predicción Final: EE. UU. 2 – 1 Australia 

Se espera una primera mitad reñida; finalmente, EE. UU. romperá la defensa en la segunda mitad, posiblemente a través de Balogun o Pulisic. Australia responderá, pero ante su público, EE. UU. debería mantener la compostura en la retaguardia. 

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Estados Unidos quiere demostrar al mundo que están listos para competir con equipos en casa, y Australia quiere probar que son buenos porque han sido buenos, no por una racha invicta. Dos equipos con ambición. Dos genios tácticos. Una noche en Colorado podría decirnos aún más.